Tengo muchos nombres. Jace Connor, el Futbolista Más Atractivo, el Deportista Más Anotador y el Fiestero Predilecto de Estados Unidos.
Me llaman de muchas maneras. Jace Connor, el Futbolista Más Sexy, el Deportista Más Goleador y el Fiestero Favorito de Estados Unidos.
Sin embargo, estoy harto de ser lo que los demás esperan. Desde que me pusieron la última etiqueta, he decidido ir en busca de nuevos apodos. Es por eso que ni siquiera puedo pensar en acercarme a la hija de mi entrenador. A Brooke Darringer le advirtieron con pelos y señales sobre mi fama de chico malo cuando la contrataron como directora de patrocinios.
Lo que nadie le dijo es que toda mi chulería esconde a un hombre de familia que ama a sus sobrinas y sobrinos tanto como al fútbol. Y eso a ella le mola. Aunque no podría estar más fuera de mi alcance, en especial cuando intenta demostrar que no la contrataron por su apellido.
LEER MÁSLo que más deseo es continuar por el buen camino, pero no solo me siento tentado por su cuerpo de infarto. Tanto su calidez como su alegre personalidad son todo lo que nunca supe que necesitaba. Brooke hace todo lo posible por mantener la relación estrictamente dentro de lo profesional, pero todas esas sesiones nocturnas en el gimnasio y las cenas a escondidas podrían convencerla de que finalmente he decidido retirarme del mercado.
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